Lo malo: A quienes tienen cierto espíritu anti-yanqui podría no gustarles el chovinismo que desborda en una parte de la película, pero recordemos que el Capitán América fue en su tiempo una creación con fines de propaganda nacionalista.
Lo mejor: Que aunque el Capitán América es más que nada una imagen publicitaria, su alter ego Steve Rogers tiene valores que son (o deberían ser) universales. Oh, sorry me acabo de aventar un spoiler. Sí, Steve Rogers es el Capitán América.
Lo peor: El estúpido 3D sigue teniendo difusión en películas que no se benefician de el. Éste es un ejemplo claro.
Lo nefasto: (Continuación del punto anterior) que las cadenas cinematográficas se quieran aprovechar del éxito asegurado de una película para intentar vender boletos para funciones 3D o 4Dx en las cuales el precio se incrementa considerablemente. Cinépolis Galerías Monterrey (donde tienen la primer sala 4Dx de la ciudad) NO tenía boletos en preventa para las funciones regulares (en glorioso 2D, pues) antes del día del estreno.
Eso me deja con la impresión de que está disminuyendo la demanda por esos formatos que rara vez aportan algo a la película.
Lo que a nadie le importa: Peggy Carter como el interés romántico del héroe nomás no se me hizo ni chula ni sexy. Pero no hay problema, en este caso la película funciona sin el interés romántico.
Lo increíble: Que el director, Joe Johnston, haya podido hacer una película tan bien lograda a pesar de que su film anterior The Wolfman fue tremendamente mala.
Lo mejor de lo mejor: Marvel no falla. Todas las películas que ha producido son un exitazo de taquilla bien merecido, pues se empeñan en hacer un buen producto y no sólo un espectáculo de efectos especiales (cof-cof... Green Lantern) o chistes idiotas (cof-cof... Transformers 2). No queda más que esperar The Avengers.
¿Recomendable?
MUCHO. Incluso si no eres fan de películas de superhéroes. En mi Marvelómetro la pongo a la par de Iron Man.
